Noche trás desvelo...

Noche trás desvelo,
no logro concebir el sueño.
¿Será realidad o ilusión?
Mi corazón llora la separación.

Oh hermosa musa,
pequeña estrella en el horizonte.
De mis sueños llegaste
y en mis pensamientos anidaste.

Dulce canción que escurre
por las manos ahora vacías,
deseosas de aquel reencuentro
esperado sin siquiera partir.

Aquellas cenizas del desolado valle
suben como recuerdos vacíos.
Una suave brizna inunda
el letargo de la rosa.

Inútiles labios sellados
intentando capturar la esencia
de aquel amor efímero
que mis brazos añoran.

Cortas las palabras quedan
ante la belleza de la pequeña niña
cuya hermosura huye fugaz
haciendo imposible su captura

A ti amor, a ti te dedico
el llanto de mis dedos,
el temblor de mis pies,
el anhelo de mi ser.

A ti llegarán mis ruegos nocturnos.
No descansaré hasta aquel encuentro
pactado, esperado ante la partida
cuya sorpresa nos dejó heridos.

Hoja que ha traído el invierno
no te dejaré caer, tu esencia cuidaré
la primavera pronto llegará
y mi amor por ti te ha de regar.

Noche trás sueño,
de mis pensamientos no escaparás,
serás el primer suspiro de mis labios
esperando los tuyos volver a rozar.